La belleza de la simplicidad que recorre cada una de sus paredes la hacen única y especial, queremos que disfrutes de la Sierra de Gata y que conectes contigo mismo, con los aromas de antaño de la naturaleza, los fogones de las vecenas y el disfrute del paso del tiempo lento que marcan los pueblos.
Dividida en dos plantas, la primera cocina comedor de unos 22 metros, con todo lo necesario para estar agusto y disfrutar de tus platos favoritos, relajarte viendo la tele en cómodo sofa, o leer en la ventana de piedra. En la segunda planta, aguardillada y totalmente pintada de blanco con vigas de hierro negro, una cama de 1,50m donde podras elegir entre almohadas duras o blandas y un colchón comodísimo para descansar y reencontrarse. Con entrada totalmente independiente para que no tengas que cruzarte con nadie.
Esta situada en la parte antigua del pueblo, dentro del casco urbano pero en una zona muy tranquila y de facil acceso, con una pequeña plazoleta justo en la puerta donde se puede aparcar el coche sin problemas.