Tenemos mucha suerte de vivir y tener nuestra casa justo en medio del paraiso que que Sierra de Gata. Pueblos separados unos de otros por cinco minutos en coche, todos enlazados con caminos en los que se puede ir a pie,o en bici, una autentica delicia para el disfrute de los ojos y los sentidos.
Todas las fotos que muestro a continuación son del entorno de nuestro pueblo, sus calles, con paerdes de piedra, olor a tiempos pasados y personas acogedoras que te esperan. Su río, el cual puedes disfrutar tanto en verano, sumergiéndote en sus aguas cristalinas, tomar el sol encima de la hierba, cenar en el chiringuito escuchando música y con un refresco frequito en la mano. La Peña, un lugar mágico donde había un santuario ahora en ruinas, escondido entre robles, alcornoques, canchales y matorrales, el sitio más bonito sin lugar a dudas de la sierra dondes voy con mi familia cada vez que queremos desconectar, donde puedes ver desde lo más alto incluso por encima de las nubes el movimiento de los pueblos.